Mi Dulcinea

Aunque muchos solteros enamorados hay
yo por ti la cabeza perdí,
me he enamorado de tus dulces labios,
de tu suave piel y el calor de tus manos.

Hoy me inclino ante ti como cualquier
mortal ante una diosa griega,
las musas del olimpo pierden gracia
cuando por la mañana te levantas con el amanecer.

Al oscurecer y partir a casa solo puedo
pensar en que llegue un nuevo día
y poder conquistar tu amor y de tus labios tomar
el mágico elixir que tus besos me dan.

La vida junto a ti es lo que quiero,
sin tu voz no me siento capaz de afrontar
ningún temor, ningún reto.
Me siento sin valor cayendo
en un precipicio sin final.

14 comentarios: